viernes, 12 de diciembre de 2014

De-lirios.



 Por los tristes barrios de tus ojos
  anduve alguna vez perdido,
  buscando los sueños que tuviste rotos
  buscando, por desiertos, lo prohibido.

 Nuestro reloj de arena,
  ese reloj de los años perdidos,
  se nos fue atascando con la pena
  y se nos pararon los latidos.

 Por el mar de los abatimientos
  vaga errante, de mis condenas, el navío,
  barco sin velas que ignoras los vientos,
  barco triste, sórdido y frío.

 A tus aguas prisioneras
  encadené mi mirada y mi pesar,
  vi tu alma, blancas venas
  que bañaron las aguas de este mar.

30 noches para hacer poesía,
  20 noviembres lloviendo escribía
  10 poemas que ninguno en su día
  tuvo escrito... "melancolía"

Tengo 17 anexos de mi vida
  y 100 heridas de papel
  trazadas en esta carta de despedida
  escrita en un trozo de mi piel.