Me quedé callado ante ti
con un ramo de simientes en las manos
me desvanecí
junto con el humo de tu rostro
creces, más de lo que yo sobreviví
y muy lentamente callas
posas tus manos sobre mí
mientras yo recito todo esto
pues, tapándome la boca, aprendí
que los ojos mienten mucho menos
de lo que las palabras ocultan entre sí
mas tú eres viento y eres aire
y yo soy frenesí
te llevas mis palabras lentamente
al lugar donde una vez te conocí
y rompes y eres agua y eres lluvia
y eres lo que una vez me hizo sentir
toda la poesía que llevo dentro
y todo lo que pienso sobre mí.