viernes, 18 de noviembre de 2016

2 14









Aquí donde vivo,
en esta tierra y condición que me expugna,
oscura raíz mártir del pánico,
tampoco he hallado el infierno.
Mi infierno, mi constante paradoja inmóvil,
quién se inmola así mismo y me espera
en silencio, entre esta comitiva escrita,
no sé si es mi alter ego
o un antagonista cruel y culpable.

Es en la esencia dónde repudio un modo lógico,
una práctica lícita para la poesía
que no sea estar maldito.
Maldito, carcomido, informe, roto,
es el texto que refleja lo que mis amigos me ocultan.

En todas las cosas, en todas las cosas que físicamente toco
destrozo la millonésima parte del segundo,
del tiempo que consume la línea ígnea que me separa
entre la vida y el humo.

Aquí en mi tierra,
aquí donde vivo,

soy irremediablemente polvo.